Tras algunos contactos personales con otros centros de formación que seguían también metodologías e-learning tuve un primer conocimiento de la UOC en 1999 al evaluarla como posible socio en un proyecto de creación de una comunidad virtual y de gestión del conocimiento para empleados en Correos y Telégrafos.
Nuevamente, en 2003 me encontré con la UOC como socio en el desarrollo de un proyecto de formación en línea para los correos europeos, el proyecto PostAcademy, en uno de cuyos cursos piloto tuve la ocasión de participar como consultor.
Finalmente, en marzo de 2004 me incorporé a la comunidad UOC como estudiante de los estudios de Asia Oriental y únicamente entonces descubrí el potencial real de esta universidad, su papel en la preparación de sus alumnos, no solo desde el punto de vista académico, sino también frente a las demandas de la sociedad de la información.
No quiero parecer únicamente laudatorio, porque todo es obviamente mejorable, pero me encuentro realmente satisfecho de mis contactos sucesivos con esta comunidad de aprendizaje.
Por cierto, a pesar de algunas tímidas iniciativas, es difícil conseguir superar de vez en cuando la virtualidad con contactos lúdicos presenciales entre los miembros de la comunidad... Seguiremos intentándolo para llevarnos tras nuestro paso por la UOC no solo conocimientos sino buenos amigos.